Macron como peligro

Lo malo de las promesas electorales es que a veces se cumplen. Macron prometió en 2017 una "reforma de la Administración" que acaba de culminar. En realidad se ha tratado de un desmantelamiento de los grandes organismos administrativos del Estado (carrera diplomática, prefectura, inspección ministerial, grandes servicios públicos, hospitales públicos, SNCF ...). Es grave, pero más lo es el tema de la destrucción de los contrapoderes en Francia, algo en lo que también está empeñado nuestra Sanchidad. Así, gradualmente se ha ido ocupando de ningunear al Consejo constitucional, al de Estado, al superior del Audiovisual, al de sondares al más puro estilo de nuestro ínclito Mézanos etc, todo ello con la infiltración y asesoramiento de firmas extranjeras (Mac Kinsey Gate, en particular, entre otras). Esta neutralización de contrapoderes ha permitido a Macron privar a los franceses de libertades fundamentales como la de movimientos, como ha hecho también Su Sanchidad con sus súbditos (antes ciudadanos) españoles. También ha despilfarrarado los fondos públicos: 600.000 millones de euros de deuda pública con una gestión calamitosa de la crisis. Ha permitido el desmantelamiento de grandes empresas francesas como Alstom, Alcatel, Essilor y Lafarge, ha elevado la presión fiscal y, sobre todo, ha puesto a Francia bajo el control de los Estados Unidos y el Nuevo Orden Mundial.

Hay quienes, en Francia piensan que Macron podría ir más lejos de ser reelegido. Aunque no comparta todas las hipótesis que se barajan en los medios franceses, no me resisto a enumerar algunas:

- Podría renunciar a su puesto de miembro permanente con derecho a veto el Consejo de Seguridad de la ONU, en favor de la Unión Europea, una decisión que sería irreversible e implicaría la pérdida de poder e influencia mundial de Francia).

- Podría dar la fuerza de ataque francesa a Alemania (premisas del Tratado de Aquisgrán),

- Podría declarar la guerra a Rusia.

- Podría  seguir vendiendo intereses nacionales, las joyas del patrimonio industrial francés (turbinas Alstom ...)

- Podría seguir dilapidando las arcas del Estado en beneficio de sus amigos banqueros y consultoras extranjeras (Mac Kinsey Gate en particular).

- Podría conceder la independencia a determinados territorios franceses (Nueva Caledonia, Córcega, Alsacia) en contra de la voluntad del pueblo y debilitar aún más a Francia.

- Podría eliminar definitivamente libertades públicas imponiendo un código QR generalizado (Billetera de Identificación Digital).

- Podría despojar de algunos derechos de propiedad con la nueva concepción de la ley Lagleize (*), a tenor de la cual ya no se sería dueño de la tierra sino sólo de los muros y pagando una renta al Estado. 

- Podría imponer la vacunación obligatoria para todos, incluso para los niños y ello a pesar de los devastadores efectos secundarios que ya ni siquiera pueden ocultarse.

Como lo más probable es que sea reelegido (**), el panorama para Francia y para la Unión Europea es preocupante.

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(*) ¿Cuál es el objetivo de la dicha ley Lagleize? El terreno sigue siendo propiedad de las agencias de tierras financiadas con fondos públicos y privados. Estos últimos se convierten en arrendadores y, como tales, emiten contratos de arrendamiento a los nuevos compradores de viviendas. A cambio de un alquiler mensual, los propietarios pueden construir una nueva casa en el terreno o comprar una propiedad ya construida. Por lo tanto, el precio de compra es sistemáticamente inferior al precio de mercado. La diferencia es del orden del 30 al 40%, dependiendo de la propiedad, el tamaño, el barrio y la ciudad. Esta ley es relativamente reciente, por lo que todavía hay varias zonas grises.

(**) La "Fédération de la Grande Mosquée de Paris" ha emitido un comunicado animando a votar a Macron. Lo mismo han hecho "siete obediencias masónicas francesas llamando a la "movilización republicana" y a votar a Macron. Musulmanes y masones de acuerdo en algo no puede presagiar nada bueno.