Situación económica preocupante de España

En colaboración con The Wall Street Journal, la Fundación Heritage viene elaborando desde el año 1995 el Índice de Libertad Económica (ILE), que toma en cuenta cuatro bloques para valorar la libertad económica de cada país: el imperio de la ley, el tamaño del Estado, la eficiencia regulatoria y la apertura de los mercados. 

España se sitúa hoy en la posición 39 de la clasificación mundial, lo que nos incluye entre los países con libertad económica muy moderada, alejados de las primeras posiciones y en una situación relativamente baja si se compara con las economías más desarrolladas. Entre los países de la OCDE, ocupamos la posición 26 de 37. En la Unión Europea, la 18 de 28. El informe advierte que España no sólo obtiene una peor nota que la media de la OCDE y que la UE, sino que en la mayoría de las variables analizadas presenta una situación deficitaria. Por otro lado, destaca especialmente la baja puntuación relativa en materias como la salud fiscal, la libertad de empresa y la flexibilidad laboral.

En cuanto a salud fiscal, España se sitúa en la posición 34 de los 37 países de la OCDE, debido a sus elevados niveles de deuda y déficit públicos. En cuanto a la libertad de empresa, la 32 de 37 dentro de la OCDE. Respecto a los países de la UE, somos el 21 de 28 en este importante capítulo. España en este campo tiene una puntuación un 14% inferior a la del promedio de la OCDE y un 9,5% inferior a la media de la UE, siendo una variable que se considera un elemento central para el desarrollo económico, con una estrecha relación con la competitividad y el nivel de renta. Los datos resultan en este apartado particularmente alarmantes por la deriva que ha experimentado España en los últimos años, principalmente a partir de 2018, fecha del infausto advenimiento de Su Inane Sanchidad.

Tomando como referencia los datos del año 1995 hasta 2021, la libertad económica global ha aumentado en 4 puntos, y en ese mismo periodo el PIB mundial ha pasado de 39,1 a 84,9 billones de dólares, mientras que el porcentaje de personas bajo el umbral de pobreza se ha reducido desde el 34,2% al 9,2% de la humanidad, lo que confirma que lo que publican algunos medios y repiten ciertos partidos no coincide con los datos reales de la economía mundial. No es cierto que cada vez haya más pobreza en el mundo sino todo lo contrario. 

El estudio señala que cuando se comparan las economías que han mejorado su índice de libertad económica entre 1995 y 2021, frente a aquellas donde la libertad económica se ha reducido, se observa que las primeras presentan como promedio un crecimiento medio anual del PIB del 2,6%, frente al 1,7% de los países que reducen su libertad económica.

La libertad económica todavía presenta otra cualidad reseñable. Centrando el análisis en los países de la OCDE, se observa una alta correlación negativa (-0,7) entre una mayor libertad económica y un menor nivel de economía sumergida. En aquellos países donde la libertad económica es muy alta la economía sumergida se sitúa sólo en el 8,4% del PIB en promedio, mientras que se eleva hasta el 18,9% de media en aquellas economías donde la libertad de empresa es moderada o baja.

La realidad es que nos vamos acercando progresivamente a los 20 últimos países con menor libertad económica.

El problema de la deuda pública en España

La deuda pública en España está alcanzando niveles mas que preocupantes.  En el primer trimestre de este año ha crecido en 47.126 millones de euros y se sitúa en 1.392.696 millones, lo que supone que alcanzó el 125,24% del PIB, mientras que en el trimestre anterior, cuarto del 2020, fue del 120%. A la muerte del nefasto dictador, ese porcentaje era del 7,3 %. Si comparamos la deuda en España en el primer trimestre de 2021 con la del mismo trimestre de 2020 vemos que la deuda anual se ha incrementado en 168.176 millones de euros. Así, la deuda per cápita en España en primer trimestre de 2021, fue de 29.424€ por habitante, mientras en el cuarto trimestre de 2020 fue de 28.428 euros, luego se ha producido un incremento de la deuda por habitante de 996 euros. Como puede comprobarse en la clasificación mundial, España está entre los países con más deuda del mundo.

Obsérvese en el gráfico qué partido ha incrementado más la deuda en los últimos treinta años.

Una de las ventajas de la edad provecta es que me ahorrará ver el empobrecimiento gradual de mi país, desgobernado por políticos incompetentes, corruptos o ambas cosas.