Hungría en el punto de mira
Algunos Estados miembros acorralaron el pasado jueves a Viktor Orbán, primer ministro húngaro, en un Consejo Europeo celebrado en Bruselas en el que se debía discutir sobre migración, la pandemia y relaciones exteriores, pero en el que el protagonista acabó siendo el líder húngaro y una ley aprobada en su Parlamento que prohíbe exponer “pornografía y contenidos que representen la sexualidad o promuevan la desviación de la identidad de género, el cambio de sexo o la homosexualidad no deben ser accesibles a menores de 18 años”, "limitando los derechos y libertades de la comunidad LGTBI" (!). De hecho, la homosexualidad, tanto masculina como femenina, es legal en Hungría. La discriminación por razón de género está prohibida. Las parejas homosexuales tienen derecho a registrar sus uniones, pero no a contraer matrimonio.
En los últimos días la tensión ha ido subiendo entre la Comisión Europea y el Gobierno húngaro, pero un gran grupo de Estados miembros han decidido que este asunto merecía un tratamiento político al más alto nivel. Un grupo de 13 países, entre ellos España, prepararon el martes, a iniciativa de Bélgica, una declaración en la que pedían a Bruselas que tomara cartas en el asunto y atacaba muy duramente al Gobierno húngaro por su nueva ley.
Este jueves 17 jefes de Estado y de Gobierno han firmado otra carta en la misma dirección, aunque sin citar de forma directa a Hungría. Fuentes diplomáticas y europeas ya avanzaban que un grupo de líderes pensaban poner este asunto sobre la mesa durante la cena en un auténtico cara a cara con Orbán. Mark Rutte, primer ministro holandés, ha llegado a asegurar que la nueva ley húngara no puede ponerse en marcha y que, de hacerlo, el país debería abandonar la Unión Europea. "Ya no tienen un lugar aquí", ha asegurado Rutte, que se ha presentado en muchas ocasiones como el antagonista de Orbán. Rutte ha explicado que Hungría debería retirar la ley, algo que Orbán ya ha descartado, señalando que de lo contrario deberían abandonar la Unión Europea.
Mientras tanto, Judit Varga, ministra de Justicia de Hungría ha contestado al primer ministro holandés en las redes sociales: “La declaración de Mark Rutte hoy no es sino un episodio más de una serie de chantajes políticos. Hungría no quiere dejar la Unión Europea. Al contrario, queremos salvarla de los hipócritas”.
“La discusión sobre la ley húngara ha sido profunda y en ocasiones emocional”, ha explicado una fuente europea, mientras que una fuente diplomática ha explicado que el primer ministro húngaro se ha mostrado sorprendido y ha defendido, como viene haciendo su Gobierno, que el problema es que el resto de capitales europeas no ha entendido la nueva ley.
Olé por los húngaros. Y qué pena los LGTBI. Sólo por llamarse así pareciera como si se autoexcluyeran de considerar la posibilidad de ser personas independientes y autónomas, como entendía Isabel Ayuso en reciente discurso. Ahora, que toda diferenciación natural en materia de sexo habia logrado ser considerada en igualdad en la sociedad, algunos grupos extremos van a tirar a la basura tanto esfuerzo logrado en justicia y sentido común. Conozco a homos y trans, bellísimas y muy válidas personas, que lamentan se les caricaturice de manera ridícula en foros y ...cabalgatas.... Qué pena...!!!
ResponderEliminarLa libertad no tiene que ser excusa para exhibiciones absurdas
EliminarLibertad y respeto siempre y a todos, menos a los hipócritas e idiotas esféricos que nos están intentando hacer ver como normal lo que no lo es. Ya está bien que en todo libro, serie, película, por narices tengan que salir relaciones homosexuales como lo lógico. Ni es lógico, ni es normal, pero es políticamente correcto, así que todo lo que tenga que ver con salir de la corrección política imperante, lleva mi aplauso. Y que tenga cuidado Europa, que es lo que se intenta, que se despedace: divide y vencerás
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